Se puede confirmar que hay trazados que parecen tener un especial idilio con una moto, parece que sí.
Se puede disfrutar, cuando hay una diferencia brutal entre dos pilotos en relación al resto de los que compiten, se puede si eres seguidor de uno ellos, o si dejas que te llenen los pequeños detalles que pasan más allá de una lucha que a veces, no tiene nada de emocionante.
Esas son algunas de las preguntas que podían surgir antes de disputarse en Motorland, la carrera de Moto GP, antes de por enésima vez ratificar que con Stoner en su retiro de pesca anticipado, los triunfos sólo los pescan dos pilotos en la reina de todas las categorías.
Le faltan alicientes a este duelo si el trazado no pone opciones de lucha, si hay una moto que esta más preparada más adaptada a estos cinco largo kilómetros, que otra y si además hay un piloto que comienza a correr con la calculadora.
A priori no resulta nada atractivo el panorama para el aficionado, pero esto no tiene que restarle mérito al triunfo de Pedrosa, que se ha regalado un momento para la historia al ser el primer piloto nacional que gana aquí en Moto GP. Un regalo perfecto para su cumpleaños, un regalo que parecía ya estar escrito. Pedrosa ya sabía que aquí era el más fuerte, que había sido capaz de ser segundo el año pasado, que a una vuelta Lorenzo podía ser superior, que en 23 giros sus manos y su potencia, más la fuerza del motor de su Honda iban a ponerle en bandeja la cuarta victoria de la temporada.
Eso y un pequeño mordisco a la brecha al frente de la clasificación que tiene en relación a Jorge Lorenzo, una pequeña resta que suma emoción a lo que queda de campeonato, un triunfo que le permite sacar un billete en el sueño de intentar ganar el Mundial. Todo en un año donde ha logrado igualar su mejor registro de triunfos y superar el balance de puntos que hasta ahora había acumulado en las campañas anteriores.
Será en buena lid y en lucha con Jorge Lorenzo, que ahora corre con la calculadora en la cabeza. El mallorquín, que ha tenido un pequeño susto en carrera, sabe que a estas alturas del juego, vale más sumar, que arriesgar y encontrarte con un cero.
El 99 de Yamaha, lo tiene claro " prefiero no ganar más carreras, si ganó el Mundial", esas han sido sus palabras en sala de prensa. Aplicando la templaza espartana, para aplacar al guerrero con hambre de victoria.
Hoy el primero se sintió radiante siendo primero y el segundo se sintió ganador, un pasó más cerca del objetivo y mejor que nunca en este Gran Premio.
Por detrás, en la vida más allá de Pedrosa y Lorenzo, Dovizioso volvía a demostrar que no siempre el oficial es mejor que lo oficioso, que hay ocasiones que el poder de creer en tus capacidades te hace exprimir más una moto más allá. Lo hizo el italiano y lo hizo Crutchlow, que volvían a dejar a Spies, " a la altura del betún", pq en este caso si hay quinto malo.
También le fue bien a Bautista que lograba su mejor resultado aquí, aunque lejos de los puestos de privilegio de la pasada carrera y bien a Aleix Espargaró que en su particular duelo con Randy de Puniert, ratificó un fin de semana extraordinario con la primera posición en el duelo de los no oficiales.
A priori no resulta nada atractivo el panorama para el aficionado, pero esto no tiene que restarle mérito al triunfo de Pedrosa, que se ha regalado un momento para la historia al ser el primer piloto nacional que gana aquí en Moto GP. Un regalo perfecto para su cumpleaños, un regalo que parecía ya estar escrito. Pedrosa ya sabía que aquí era el más fuerte, que había sido capaz de ser segundo el año pasado, que a una vuelta Lorenzo podía ser superior, que en 23 giros sus manos y su potencia, más la fuerza del motor de su Honda iban a ponerle en bandeja la cuarta victoria de la temporada.
Eso y un pequeño mordisco a la brecha al frente de la clasificación que tiene en relación a Jorge Lorenzo, una pequeña resta que suma emoción a lo que queda de campeonato, un triunfo que le permite sacar un billete en el sueño de intentar ganar el Mundial. Todo en un año donde ha logrado igualar su mejor registro de triunfos y superar el balance de puntos que hasta ahora había acumulado en las campañas anteriores.
Será en buena lid y en lucha con Jorge Lorenzo, que ahora corre con la calculadora en la cabeza. El mallorquín, que ha tenido un pequeño susto en carrera, sabe que a estas alturas del juego, vale más sumar, que arriesgar y encontrarte con un cero.
El 99 de Yamaha, lo tiene claro " prefiero no ganar más carreras, si ganó el Mundial", esas han sido sus palabras en sala de prensa. Aplicando la templaza espartana, para aplacar al guerrero con hambre de victoria.
Hoy el primero se sintió radiante siendo primero y el segundo se sintió ganador, un pasó más cerca del objetivo y mejor que nunca en este Gran Premio.
Por detrás, en la vida más allá de Pedrosa y Lorenzo, Dovizioso volvía a demostrar que no siempre el oficial es mejor que lo oficioso, que hay ocasiones que el poder de creer en tus capacidades te hace exprimir más una moto más allá. Lo hizo el italiano y lo hizo Crutchlow, que volvían a dejar a Spies, " a la altura del betún", pq en este caso si hay quinto malo.
También le fue bien a Bautista que lograba su mejor resultado aquí, aunque lejos de los puestos de privilegio de la pasada carrera y bien a Aleix Espargaró que en su particular duelo con Randy de Puniert, ratificó un fin de semana extraordinario con la primera posición en el duelo de los no oficiales.
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